Si ya dominas el cultivo en tierra y te quieres lanzar a un nivel un poco más avanzado te interesará conocer más detalles acerca del cultivo en coco. Es una alternativa bastante popular con la que puedes poner a prueba tu destreza como cannabicultor y obtener unas cosechas diferentes a las tradicionales pero igual de satisfactorias.
Ventajas e inconvenientes de los cultivos en coco
No es que sea un tipo de cultivo reservado únicamente a los expertos, pero un poco de información previa te vendrá bien a la hora de sopesar si es el tipo de cultivo al que le quieres dedicar tu tiempo o si prefieres pasarte a otra cosa.
Ventajas
- Es un sustrato más ligero y voluminoso que la tierra por lo que con menos cantidad podrás rellenar más espacios.
- Al no ser un tipo de sustrato tan compacto y pesado como la tierra, el coco permite que las raíces se desarrollen con mayor rapidez y eso también influye en la velocidad con la que crece la planta. En este sentido, es un producto perfecto para los cultivadores que no se caracterizan por un exceso de paciencia.
- La floración es explosiva, rápida, abundante… Da gusto ver la planta cultivada en coco cuando llega este momento. Es el resultado de un crecimiento vigoroso y en un tiempo récord.
- ¿No se te da muy bien lo de controlar el riego? Con el sustrato de coco lo tienes más fácil. Se trabaja con ciclos alternos de humedad y sequedad para que la marihuana tenga tiempo de absorber correctamente los nutrientes. Después de las primeras semanas de cultivo este proceso se puede incluso automatizar porque se mantiene muy estable. De hecho, cuando el cultivo es lo suficientemente grande, lo más recomendable y económico es instalar un sistema de riego por goteo.
Desventajas
- Regar es sencillo en cuanto a la cantidad de agua que debes utilizar, pero vas a tener que tomarte tu tiempo en realizar el cóctel de nutrientes que necesita la planta. Al tratarse de un sustrato inerte no hay más opción que la de añadir al agua de riego todo lo que la marihuana necesita a nivel biológico para que no se interrumpa su desarrollo.
- Algunos cultivadores opinan que el sabor de la cosecha no es el mismo que el que se obtiene de una planta desarrollada en tierra. Sin embargo, parece ser una apreciación bastante personal. En cualquier caso, es algo que siempre puedes modificar durante el proceso de floración utilizando los productos adecuados.
- Necesitas llevar un control más exhaustivo de los niveles de pH y de electroconductividad. Teniendo en cuenta que todos los nutrientes se los tienes que aportar tú al agua de riego, es comprensible que este control tenga que ser más riguroso.
- Ahora que sabes que la utilización de nutrientes y abonos es obligatorio, ya te habrás podido hacer una idea de que es bastante probable que el presupuesto para este tipo de cultivos se eleve un poco más de lo habitual.