Es evidente que el olor de la marihuana es tan peculiar, como penetrante e intenso y puede llamar mucho la atención y delatar la presencia de nuestro cultivo. Por esta razón dependiendo de las condiciones de tu cultivo de interior y de donde se encuentra situado, puedes necesitar llevar un control de olores para enmascararlos cuando salgan al exterior.
Lo más recomendable es utilizar un filtro antiolor incorporado a tu sistema de extracción para que el aire que salga al exterior no llame la atención de los curiosos.
El filtro antiolor adecuado para tu cultivo se elige en función del tamaño que tenga y del volumen de plantas que aloja, dependiendo de las necesidades de cada cultivador existen filtros de varias las medidas y tamaños, así como de diferente diámetro de boca y capacidad de extracción.
Es importante que el filtro antiolor que elijas para tu cultivo interior tenga capacidad para filtrar más aire del que es capaz de sacar tu sistema de extracción. De esta forma, nos aseguraremos que todo el aire es filtrado y de que no queden olores llamativos de tu cultivo en interior de cannabis.