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¡Dale al interruptor! Ahora que la iluminación perfecta ha llegado hasta tu cultivo de marihuana lo suyo es aprovechar al máximo la capacidad de las bombillas que hayas instalado. Lo más recomendable es completar tu sistema de iluminación con unos plásticos reflectantes que te permitan recoger de manera efectiva toda esa luz que sale disparada hacia las paredes para reconducirla hacia el verdadero objetivo: tus plantas de cannabis.
A la hora de comprar un plástico reflectante debes tener en cuenta dos aspectos. Por un lado, su material de composición. Por otro, su índice de reflexión. Son dos elementos estrechamente relacionados e influyen en el tacto del plástico, en su grosor, en su manejabilidad y por supuesto en su precio.
El plástico reflectante blanco y negro es uno de los más simples en cuanto a su composición y uno de los más populares entre los cultivadores novatos por los buenos resultados que ofrece en relación a su precio. En plantaciones más profesionales los growers se decantan por marcas especializadas como Diamon, Orca o Mylar, con porcentajes de reflexión mucho mayores. Esto es interesante en cultivos de gran tamaño ya que evitan que las paredes de la habitación se calienten haciéndolos invisibles a las cámaras térmicas.