Hoy en día podemos encontrar una gran diversidad de híbridos en el mercado, estas variedades, que atesoran características que se intentan aislar mediante la cuidada selección de los individuos que mejor reflejan los rasgos de los parentales cruzados.
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Todos esos cruces se hacen con plantas que vienen de las dos principales familias de cannabis que existen, las Índicas y las Sativas, estas dos razas predominantes de cannabis tienen particularidades muy marcadas ya que provienen de zonas con condiciones climáticas muy diferentes, lo que ha hecho que se aclimaten a lo largo del tiempo dándoles unas características muy distintas en cuanto a su morfología, su aroma y varios aspectos más.
ÍNDICAS
Las Índicas son plantas originarias de las montañas del Tíbet y de las zonas altas que hay entre Afganistán y Pakistán, las bajas temperaturas de estas zonas, hacen que estas plantas sean más duras, lo que las hace especialmente adecuadas para cultivadores principiantes, ya que resistirán mejor los despistes que puedan tener.
La forma de estás plantas es más arbustiva, tienen las hojas más anchas y poca distancia entre los brotes, los cogollos son compactos, cristalinos y olorosos, lo que las hace muy adecuadas para la obtención de resina. Su floración es de apenas cincuenta o sesenta días.
SATIVAS
Las variedades Sativas son procedentes de zonas tropicales cálidas y húmedas, estas plantas están acostumbradas a veranos largos y calurosos, lo que alarga su floración hasta los 80 días o incluso más y las hace menos adecuadas para los cultivos de interior y para los que plantan por primera vez.
Al contrario que las Índicas, las Sativas son plantas mucho más grandes, con hojas finas y alargadas y con mucha distancia entre los brotes, con tallos largos y fibrosos, que se coronan con cogollos grandes y vaporosos, que no se compactan tanto como los de las Índicas para evitar que se pudran con la humedad.
En cuanto a su efecto, las Índicas son más sedantes e inducen a la relajación muscular y las Sativas son más euforizantes, las dos tienen propiedades terapéuticas y son utilizadas para por mucha gente para mejorar su calidad de vida.
Debido a la multitud de cruces que se han producido con el paso del tiempo, apenas quedan variedades puras originales disponibles, poco a poco se han ido cruzando parentales y aislando genes interesantes, para conseguir híbridos adecuados para su cultivo en ciertas zonas o que tengan características apreciadas por los cannabicultores.
Así se han creado plantas tan interesantes como Skunk, White Widow, AK-47, Critical, etcétera, que han llegado a ser muy valoradas e incluso se han creado subfamilias a partir de estas genéticas concretas, por ejemplo han surgido multiples cruces con fenotipos típicos de Skunk mezcladas con características interesantes de otras variedades.
Te guste la variedad que te guste, lo mejor es probar varias genéticas para saber que tienen de bueno o de malo y poder decidir cual es tu favorita.
¿Y tú, cuál prefieres?
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