Tipos de poda

La poda se emplea sobre todo para dar a las plantas de marihuana la forma más adecuada para el cultivo y para redistribuir la fuerza de la planta hacia donde más nos interesa.

En exterior se utiliza normalmente para que las plantas no llamen demasiado la atención por su tamaño y en interior para que las plantas tengan más puntas y estas se queden a una altura similar entre ellas, lo que proporciona una mayor producción.

Los cultivadores suelen ser un poco reacios a podar sus plantas, ya que piensan que no lo van ha hacer bien o que pueden dañar sus plantas, pero la verdad es que con unas pequeñas pautas no es complicado hacer una buena poda.

Lo primero que tenemos que saber es que no se debe podar una planta que tenga menos de tres o cuatro nudos o brotes, una vez que la planta llega al tercer o cuarto estadio, ya tiene la capacidad de asimilar la poda, también es importante tener en cuenta el porcentaje de materia vegetal que le estamos quitando a la planta en la poda, ya que si podamos demasiado, la planta puede resentirse. La poda ha de hacerse con una herramienta adecuada, si utilizamos unas tijeras, tienen que estar afiladas para realizar un corte limpio, y desinfectadas previamente con alcohol, para evitar la transmisión de enfermedades de unas plantas a otras.

La mejor etapa para realizar las podas es durante el periodo de crecimiento vegetativo o al comienzo de la floración en el caso de las ramas de la parte inferior y las hojas grandes, el resto del periodo de floración no es conveniente podar, ya que corremos el riesgo de que la planta sufra un estrés innecesario que provoque una perdida de rendimiento o incluso problemas peores como hermafroditismo. Otro caso distinto es cuando sufrimos el ataque de un insecto o de un hongo, en el que la poda se hace para intentar minimizar el daño del parásito.

Tipos de poda

Poda de las hojas enfermas

Las hojas enfermas pueden ser portadoras de hongos e insectos, se consideran que una hoja esta enferma cuando tiene dañado más del 50% de su superficie, por lo que conviene hacer una limpieza periódica de estas para mantener el lugar de cultivo limpio y sano. Cuando eliminamos este tipo de hojas es conveniente hacerlo con el peciolo incluido (el peciolo es el tallito que une la hoja al tallo principal), para evitar las pudriciones.

Poda de ramas

En los cultivos de interior es común eliminar las ramas de la parte más baja de la planta, primero por que esas ramas no reciben luz suficiente para hacer buenos cogollos y utilizan recursos de la planta, si las eliminamos esos recursos pueden ser utilizados para engordar los cogollos de la parte superior y segundo para evitar que las hojas de la parte inferior se pudran al estar en contacto con la humedad del sustrato o sean refugio de las plagas.

En el exterior, cuando la planta coge un volumen considerable, también se eliminan algunas de las ramas de la parte inferior e incluso de la parte interior, ya que normalmente se acaban secando o reciben poca luz y sus cogollos suelen ser muy pequeños.

Poda apical

Este tipo de poda se realiza sobre todo para dar una forma más arbustiva y discreta a las plantas de cannabis, tanto de interior como de exterior, con este tipo de poda se estimula el crecimiento de las ramas laterales y en lugar de desarrollar la típica punta central, la planta desarrolla dos yemas donde solo había una, estas dos puntas son un poco más pequeñas, pero compensan de sobra la producción de la punta central.

Para evitar que el corte realizado en la poda se pueda pudrir o generar una infección es mejor realizarlo ligeramente inclinado y utilizar masilla cicatrizante para dejar la herida de la planta protegida de los agentes externos.

No conviene realizar este tipo de poda si a la planta le queda menos de una semana para entrar en floración o si ya está en esta fase, ya que la planta puede retrasar la formación de flores y brotes, en exterior la fecha límite serían los primeros días de Julio, aunque esta fecha puede variar debido al clima y a las condiciones de la zona.

Doblado de puntas

El doblado de los brotes tiene un efecto muy parecido a la poda apical, ya que redistribuye la fuerza de la punta principal hacia las ramas laterales, pero sin eliminar la punta principal que simplemente se dobla sobre si misma sin llegar a cortarse.

Poda fim

Otra variación de la poda apical es la poda fim, esta técnica se descubrió por error (de hay sus siglas que significan fuck I missed), consiste en cortar un 85% más o menos de la yema inicial, esto hace que en lugar de una yema, la misma punta genera cuatro o más yemas, si se hace mal lo que puede pasar es que hagamos una poda apical sin querer o que simplemente recortemos las puntas de las hojas, sin llegar a podar realmente.

Poda de las hojas grandes

Hay bastantes opiniones sobre si es conveniente o no quitar las hojas grandes, muchos cultivadores dicen que esas hojas le quitan energía a los cogollos o que no dejan que les entre bien la luz, pero en realidad esas hojas están puestas precisamente para la obtención de energía, a parte de ser un deposito de alimento que la planta utiliza cuando necesita, no es problema eliminar las de la parte inferior o las que estén dañadas, pero no conviene hacerlo con las hojas sanas.

A parte de estos detalles, debemos decir que las plantas que van a ser podadas deben estar sanas y tener una edad mínima (hemos comentado que a partir del tercer o cuarto brote), también que no viene mal regar un poco la planta antes de podarla y que cuando se podan las ramas o las hojas sobrantes, se hace por que realmente hay mucha masa vegetal, no por gusto.

Con estos consejos la poda no tiene por que resultar complicada, puede ser una herramienta muy valiosa en el cuidado de tus plantas de cannabis.